El Gobierno flexibilizó los requisitos para el comercio de armas y municiones
La ANMaC eliminó exigencias administrativas para pequeños comerciantes y talleres. También autorizó a las fuerzas federales a reutilizar armamento decomisado.
El Gobierno nacional flexibilizó los controles sobre el comercio y la fabricación de armas y municiones, en el marco de su política de desregulación estatal. La medida fue oficializada este jueves a través de la Resolución 49/2025, publicada en el Boletín Oficial y firmada por el titular de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC), Juan Pablo Allan.
La normativa elimina varios requisitos administrativos que hasta ahora debían cumplir comerciantes, talleres y fábricas, con el objetivo de "simplificar el funcionamiento del sector", según informaron fuentes oficiales. Entre los cambios más relevantes se encuentra la eliminación de la necesidad de contar con habilitación municipal y la inscripción obligatoria en ANMaC para ciertos usuarios, como distribuidores minoristas y mayoristas, talleres de reparación, fábricas artesanales y clubes de tiro con instalaciones propias.
La medida está dirigida principalmente a pequeños productores y locales cuya producción anual no supere las 1.200 unidades. Además, se amplió el alcance de la desregulación a fábricas de componentes, repuestos, municiones y elementos de recarga, talleres especializados y plantas de destrucción de materiales controlados.
Desde el organismo aclararon que, a pesar de la eliminación de ciertos trámites, se mantienen vigentes las normas de seguridad para el almacenamiento y manipulación de armas, así como las regulaciones locales, provinciales y nacionales.
En línea con esta resolución, la ANMaC también habilitó a las Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales a reutilizar armas decomisadas en operativos, previa inspección y resguardo en depósitos oficiales hasta que el Ministerio de Seguridad defina su uso.
Por otra parte, se modificaron los procedimientos para el destino final del armamento decomisado. Tras una sentencia firme, la ANMaC podrá decidir si destruye las armas o las destina a fines de interés público, aunque su uso quedará limitado exclusivamente a fuerzas de seguridad.
La resolución forma parte del plan de simplificación normativa que impulsa el Ejecutivo, con el argumento de reducir la burocracia y fomentar el desarrollo económico. Según el Gobierno, los más de dos mil municipios del país imponen regulaciones dispares que generan una "carga excesiva" para el sector comercial vinculado a materiales controlados.
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