Avanza el plan de Torres y Milei para convertir a Chubut en una provincia minera

Chubut vuelve a estar en el centro de la agenda extractiva nacional. En tiempo récord, el gobierno de Javier Milei y la administración provincial de Ignacio "Nacho" Torres cerraron un acuerdo con Yacimientos para avanzar en la explotación de uranio en territorio chubutense. La reunión fue encabezada por el jefe de Gabinete Guillermo Francos, el presidente de YPF, Horacio Marín, y el propio gobernador. Las fotos oficiales celebran el avance del denominado Plan Nuclear Argentino, que tiene como objetivo convertir a Chubut en una provincia minera.

En el marco de este plan, YPF anunció la creación de una nueva subsidiaria: YPF Nuclear, que estará a cargo de liderar la minería de uranio en el país, iniciando sus operaciones en Chubut. "El futuro es nuclear", aseguran desde Nación.

Sin embargo, el anuncio no tardó en generar controversia, ya que se da en un contexto de ausencia total de debate público, sin consulta previa a las comunidades, sin audiencia ambiental ni licencia social. La movida se produce además en una provincia que ha sido protagonista de fuertes resistencias contra la megaminería, con movilizaciones históricas como las de diciembre de 2021 que forzaron la derogación de la ley de zonificación minera en menos de una semana.

La iniciativa, que forma parte del plan de minería para extracción de uranio en Chubut, fue confirmada por el perfil oficial del presidente de YPF en redes sociales, donde compartió las imágenes del encuentro con Torres y Francos. Allí se destaca que la minería de uranio será "una pieza clave" en el esquema energético nacional.

Desde sectores ambientales y sociales de la provincia ya se manifestaron con preocupación ante lo que consideran un nuevo avance extractivista sin el aval de la ciudadanía. "¿Chubut elige ser una provincia minera o lo deciden entre cuatro personas en una oficina?", fue una de las frases más compartidas en redes sociales, reflejando el malestar creciente por la falta de participación democrática en decisiones que afectan el futuro del territorio y el ambiente.

Mientras tanto, el gobierno de Torres guarda silencio sobre la letra chica del convenio firmado y no ha emitido declaraciones públicas sobre cómo se garantizarán los controles ambientales, qué zonas estarían en riesgo o si la Legislatura tomará intervención.

Así, en nombre del desarrollo y la energía del futuro, la minería del uranio se abre paso en Chubut, una provincia que, hasta ahora, ha dicho varias veces que no.